26 Abr Conoce el origen de la coctelería
Todos asociamos la coctelería con los tiempos modernos, los bares, pubs… Pero en realidad la coctelería es mucho más antigua de lo que creemos.
Algo más que un vaso y una buena bebida
Algunos remontan los primeros cócteles con fines medicinales, a la época de Alejandro Magno. Para otros surge en el siglo XVI con diferentes espíritus y hierbas. Uno de sus mejores logros, el Benedictine: un preparado creado en la abadía de Fécamp por el monje Dom Bernardo Vinvelli. Una bebida muy especial compuesta nada más y nada menos que veintisiete especias y hierbas.
No obstante, la coctelería, según la conocemos hoy, se la debemos a Antoine Amédée Peychaud. Empezó a elaborar bebidas para sus amigos sin fines medicinales. Como medida utilizó una huevera. Según algunos, a él le debemos también la palabra cocktail.
El salto definitivo tendría lugar con la guía How to Mix Drinks; or, The Bon Vivant’s Companion, de Jerry Thomas. Está considerado el primer libro de recetas de cócteles, y que en la actualidad se sigue editando y utilizando.
Los cócteles se hicieron tremendamente populares en Estados Unidos a finales del XIX. Llegaron después al siglo XX como todo un símbolo de glamur y distinción. Y no solo los cócteles, la figura del barman también ha gozado de popularidad y cierto prestigio entre los aficionados a esta glamurosa bebida. Algunos de los más famosos: el ya nombrado Jerry Thomas. Su cóctel Vasconcel, de 1934, y su colección de licores del mundo, sus cuatro libros sobre licores y vinos y unas 20000 botellas fueron los que le dieron la fama.
Ada Coleman fue una mujer que empezó en la barra del bar del hotel Savoy y que pronto destacó. A ella le debemos el cóctel Hanky Panky. Por otro lado, tenemos a Santiago Policastro, el bartender argentino más conocido como ‘Pichín, el barman elegante’. Su clarito, inventado en 1954, le dio la fama. Además, fundó el IBA (International Bartending Asociation), del que fue campeón en varias ocasiones. Su decálogo del barman es todo un referente para la profesión. Y para terminar, te nombramos a un español, Pedro Chicote, también conocido por Perico Chicote.
Un buen vaso de cristalfino
Y por último, te hablamos del vaso de cóctel. ¿Qué sería un cóctel sin un buen vaso de cristal fino? La copa clásica o copa Martini; la copa margarita, el vaso old fashioned… Tampoco te olvides del vaso Tumbler o Highballl, de la copa clásica de champán, de la copa de balón, de la copa flauta, del vaso Toddy o de la copa Hurricane. Son tan solo algunos de los representantes que ayudan a que un cóctel nos sepa a… gloria.
Chin chin.