11 Mar Claves para elegir la copa de vino perfecta
No hay nada como degustar un buen sorbo de vino. Y aunque creas que la selección del producto es lo principal a la hora de disfrutar o no de su sabor, lo cierto es que la copa en la que va servido tiene mucho más peso del que te imaginas.
Desde Dkristal te contamos las características principales de una copa de vino y cómo esta influye en cierta manera en nuestro gusto a la hora de consumir el vino. ¡Toma nota!
La importancia del material de fabricación
Si te gusta el vino, sabrás que mayoritariamente las copas están hechas de cristal o de vidrio. Esto se debe a que precisamente este material permite que las paredes de la copa sean lo más fina posibles, haciendo que el tacto no resulte incómodo a nuestra boca y permitiendo una mejor degustación. Por no hablar de la visibilidad que ofrece este tipo de material.
En Dkristal utilizamos cristal de alta resistencia en la fabricación de nuestras copas, así que es una excelente opción en caso de que estés buscando una buena cristalería para tu vino.
La forma de la copa
Otro aspecto fundamental a la hora de escoger la copa correcta, es que la base sea lo suficientemente ancha para conseguir estabilidad, y que el cuerpo de la copa se adapte perfectamente a las manos para poder sujetarlo con comodidad. Además, es muy importante que tenga el diámetro correcto para ofrecer una buena oxigenación a la hora de servir el vino.
Deberás saber que en Dkristal cuidamos todos los detalles del proceso de fabricación de nuestras copas y vasos para que el resultado ofrezca las mejores calidades posibles.
Tipos de copa según el vino
Una vez tengas claros los aspectos fundamentales de las copas de vino, es importante que conozcas también que hay ciertas diferencias a la hora de degustar un tipo de vino u otro, pues no es lo mismo la copa que se utiliza para un tinto que para un espumoso, por ejemplo. ¡Echa un vistazo a las principales diferencias!
- Copa para vino blanco. Con una figura muy estilizada y de tallo largo, las copas para vino blanco suelen presentar una apertura algo más abierta que el resto. Es una forma de mantener el sabor dulce del vino que luego se potenciará en la boca, como es el caso de nuestra copa Avant Garde 55, perfecta para este tipo de vino.
- Copa para vino tinto. Estas copas suelen ser de tamaño algo mayor que las utilizadas para el vino blanco. Un ejemplo claro es nuestra copa Splendour 55.
- Copa para vino espumoso. Son copas mucho más alargadas, estrechas y estilizadas que el resto. El objetivo no es otro que conservar correctamente el líquido y sus características burbujas. El ejemplo perfecto de este tipo de copas lo encontrarás en nuestra copa Prosecco 30.
Ahora que te has convertido en un experto en selección de copas de vino, solo te falta elegir cuál de todas las que en Dkristal te ofrecemos quieres que se convierta en tu próxima adquisición. ¡Consulta ahora nuestro catálogo online!