Trucos para que tus copas de cristal brillen como el primer día

¿Cuántas veces te ha pasado que al ir a poner la mesa en un día especial te has encontrado con que tus copas tienen manchas, marcas de dedos o gotas de agua o no brillan como deberían? Muchas veces, en lugar de presumir de nuestra cristalería, lo que se consigue es precisamente el efecto contrario. En este artículo te queremos enseñar cómo hacer para que esto no te vuelva a ocurrir, compartiendo algunos trucos que te serán realmente útiles para que tus copas estén siempre brillantes y luzcan perfectas.

¿Cómo lavar tus copas de cristal?

  • Lavarlas a mano en lugar de en lavavajillas.

Lo más recomendable para que tus copas no se rayen, salgan sin marcas, conserven su brillo y, sobre todo, no se rompan, es lavarlas a mano y no en el lavavajillas. Esto te añadirá algo de trabajo extra, pero el resultado merecerá mucho la pena.

  • No dejar la bebida en las copas después de utilizarlas.

Un error muy común que todos hemos cometido alguna vez por desconocimiento o despiste es dejar las copas con bebida en su interior después de utilizarlas, ya que puede dejar una marca que nos será difícil de eliminar. Este riesgo se multiplica, por ejemplo, si la bebida es vino tinto. De esta manera, para evitar sustos, lo mejor es dejarlas siempre en remojo después de su uso si no vamos a lavarlas inmediatamente.

¿Qué pasa si se nos ha olvidado vaciarlas y ha pasado un tiempo tras su uso?

En este caso, existen algunos trucos para que el daño a la pieza de cristalería sea el mínimo posible. Uno de ellos es meter las copas en agua templada con vinagre durante aproximadamente diez minutos para eliminar los restos de bebida y, una vez éstos hayan desaparecido, lavarlas de la forma habitual (como ya hemos dicho en el punto 1, mejor si es a mano).

  • Utilizar una esponja, jabón neutro y agua templada.

Lo ideal para lavar copas de cristal delicado con el mejor resultado es utilizar una esponja, un jabón neutro y tener cuidado de que el agua esté templada. Una vez hayas enjuagado la copa con agua templada y hayas eliminado los restos de suciedad, debes echar una pequeña cantidad de jabón neutro a la esponja y, muy importante, con la copa llena de agua frotar por sus bordes. Por último, aclara la copa con agua abundante sin mucha presión.

¿Cómo secarlas?

  • Utilizar un trapo de lito, paño de cocina seco anti pelusas o papel de cocina.

En hostelería suele utilizarse un trapo de lito para acabar con manchas y huellas en la cristalería. No obstante, si no tienes, puedes utilizar un paño de cocina que sea anti pelusas y en seco; o también papel de cocina si no dispones de los anteriores.

¿Cómo conseguir que brillen más y estén libres de manchas?

  • Utilizar vinagre para conseguir un extra de brillo.

Si queremos que nuestras copas brillen siempre como el primer día, un tip muy útil es sumergirlas en agua con unas gotas de vinagre blanco. ¡Tus copas parecerán nuevas!

  • Eliminar manchas utilizando pasta de dientes.

¿Tus copas tienen manchas de las que no eres capaz de deshacerte? La solución podría estar en utilizar pasta de dientes. Sí, has leído bien. Esparce la pasta de dientes con la mano por tus copas y frota con un cepillo de dientes en los lugares en los que se encuentran las manchas. Acláralas, esta vez con agua caliente, y sécalas. Verás como todas las manchas han desaparecido.

  • Devolverles el brillo con vapor de agua.

Es posible que con el tiempo y el uso, tus copas se hayan vuelto algo opacas. Es algo normal si no se toman las precauciones adecuadas. Si tus copas están opacas, podrás devolverles su brillo poniendo agua a hervir y pasándolas por encima del vapor para que éste las impregne por completo. Inmediatamente, seca las copas con los trapos mencionados anteriormente. ¡No te olvides de sujetarlas por la base para que no se queden marcas de dedos!

Si tienes en cuenta todos estos consejos para cuidar tu cristalería, ésta se mantendrá mucho más tiempo como el primer día y evitarás desafortunadas sorpresas. ¡Serás la envidia de todos tus invitados!