Inconfundibles. El diseño de la colección Virgo hace que estos sean unos vasos que no pasan desapercibidos.
Los vasos Virgo alto y Virgo bajo comparten una misma base: el diseño geminado de la parte inferior del vaso. Como si de un trébol se tratase, este detalle convierte a los vasos Virgo en únicos.
Esto, y el hecho de estar realizados en cristal fino de alta resistencia. Brillo, transparencia, alta resistencia, ligereza, elegancia… son cualidades diferenciadoras de estos vasos, cuya principal diferencia radica en la altura (y en su capacidad).
El vaso Virgo alto se prolonga hasta los 13,2 cm de altura y gana en capacidad, hasta alcanzar los 35 cl. Por su parte, el vaso Virgo bajo muestra todo su esplendor en sus 9 cm de altura y en una capacidad total de 30 cl. ¿Con cuál te quedarías?